Negarse a vender tu propiedad, ante una gran empresa, mucha veces es imposible. Ya sea, porque lo que están pagando, muchas veces es increíble o, porque, ante la presión e insistencia, las personas terminan cediendo de igual manera sus títulos.
¿Pero, ¿qué pasa con esos obstinados que, simplemente, NO QUIEREN VENDER? Son pocos, y estas son algunas de esas historias. La primera, fue la que inspiró a los creadores de la película Up!….¿la conoces? Acá te contamos por qué…
El Año 2009, Se Estrenó La Película Para Niños Up!, La Que Cuenta Un Bello Relato En El Que Un Hombre Decide Honrar La Memoria De Su Difunda Esposa, Conservando La Casita En La Que Siempre Habían Vivido Y Realiza Un Viaje En Ella, Al Lugar Al Que Siempre Habían Querido Ir Ambos.
Algo Así Sucedió En La Vida Real, Pues En Seatlle, Una Anciana Mujer Llamada Edith Mcefield, Siempre Se Negó A Vender Su Casa, A Pesar De Que A Sus Alrededores Se Estuviera Construyendo Un Gran Edificio.
Esta Mujer, El Año 1956 Volvió A Los Estados Unidos, Para Cuidar A Su Madre Hasta Que Murió, En La Misma Casa, Por Lo Que No Quería Deshacerse De Ella.
¿Te Resulta Familiar La Fotografía Que Sigue, Con La Película? Claro…Si Es Prácticamente La Misma. La Inspiración De La Animación.
Barry Martin, Era El Jefe De Obra De La Construcción Que Se Hacía Tras La Casa De Edith Y, Él Tuvo Que Intentar Varias Veces De Convencerla De Que Venda La Casa. Tanto Así Que, Incluso, Terminaron Siendo Amigos… Él La Llevaba A La Peluquería Y Tomaban Desayuno Juntos.
Ella Era Una Mujer Muy Fuerte. Fue Espía Para La Inteligencia Británica En Alemania, Escapó De Dachau, El Campo De Concentración Y, También Aprendió A Tocar El Clarinete, Pues Su Primo Benny Goodman, Un Legendario Músico De Jazz Le Enseñó.
Acá Se Muestra A Barry, Intentando Convencer A La Mujer De Que Venda, Pero Ella Solo Lo Llama Para Que Él La Pueda Ayudar En Sus Quehaceres. “Yo No Quiero Mudarme, No Necesito Dinero. Esta Es Mi Casa, Mi Madre Murió Aquí Y No La Voy A Dejar”, Dijo Edith A Barry.
Edith, Nunca Pudo Ver La Película Inspirada En Su Valentía, Pues Murió Un Año Antes Y, Sin Herederos, Le Dejó La Casa A Su Único Amigo Barry. Este, En Vez De Ofrecérsela A Sus Antiguos Jefes, Decidió Mantener La Casa Tal Cual Como La Dejó Su Amiga.
Esta, Es Otra Casa, Que Pertenecía A Yang Wu Y Wu Ping, En China. De Los 241 Propietarios Del Sector, Esta Familia Fue La Única Que Se Negó A Vender. Lucharon Unos Dos Años, Contra Contratistas Y Empresarios, Pues Querían Una Indemnización Mayor A La Que Ofrecían.
Finalmente, Lograron Recibir Lo Que Esperaban Y La Casa Sí Fue Destruida, Pero Esto Sin Duda Creó Un Precedente Para Las Futuras Negociaciones En China.
Otro Caso, En El Aeropuerto Internacional De Narita, En Japón, Se Encuentra Este Campo De Cultivos, Cuyos Dueños, No Quisieron Vender Por Ningún Motivo. La Distancia Entre Sus Tierras Y Las Pistas De Aterrizaje, Es De Un Poco Más De 30 Metros.
El Dueño De Esta Casita, Ubicada En Washington, Rechazó Muchas Ofertas Que Los Contratistas Le Hicieron. Es Que La Casa Pertenece A Un Arquitecto De 69 Años Y No La Va A Vender, A Menos Que Se Ofrezcan Una Suma Millonaria.
Hoy En Días, Utiliza La Casa Como Oficina De Arquitectura, Donde Austin Spriggs (Dueño), Trabaja Junto A Su Hija Ángela.
Esta Casa, También En China (Ciudad De Changsha), Es Sorprendente, Pues Fue Abandonada, Mientras Se Construía Un Gran Centro Comercial A Sus Alrededores.
En A Parte Superior, Hoy Viven Algunas Personas, Y En El Primer Piso Hay Abierto Un Negocio.
Créditos: viralnova
¡Algunos que luchan contra sus creencias! No olvides compartir estos curiosos datos.
